El que no recoge conmigo, desparrama




El que no recoge conmigo, desparrama


Jueves III Cuaresma



  •   Oración al Espíritu Santo

Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración perfecta y absoluta de todo mi ser, que os hago en este día para que os dignéis ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida, en cada una de mis acciones, mi director, mi luz, mi guía, mi fuerza, y todo el amor de mi corazón.

Yo me abandono sin reservas a vuestras divinas operaciones, y quiero ser siempre dócil a vuestras santas inspiraciones. 

¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María y en María, según el modelo de vuestro amado Jesús. Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor. Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén




+ Santo Evangelio


Evangelio según San Lucas 11,14-23. 

Jesús estaba expulsando a un demonio que era mudo. Apenas salió el demonio, el mudo empezó a hablar. La muchedumbre quedó admirada, pero algunos de ellos decían: "Este expulsa a los demonios por el poder de Belzebul, el Príncipe de los demonios". 

Otros, para ponerlo a prueba, exigían de él un signo que viniera del cielo. 

Jesús, que conocía sus pensamientos, les dijo: "Un reino donde hay luchas internas va a la ruina y sus casas caen una sobre otra. 

Si Satanás lucha contra sí mismo, ¿cómo podrá subsistir su reino? Porque -como ustedes dicen- yo expulso a los demonios con el poder de Belzebul. 

Si yo expulso a los demonios con el poder de Belzebul, ¿con qué poder los expulsan los discípulos de ustedes? Por eso, ustedes los tendrán a ellos como jueces. 

Pero si yo expulso a los demonios con la fuerza del dedo de Dios, quiere decir que el Reino de Dios ha llegado a ustedes. 

Cuando un hombre fuerte y bien armado hace guardia en su palacio, todas sus posesiones están seguras, pero si viene otro más fuerte que él y lo domina, le quita el arma en la que confiaba y reparte sus bienes. 

El que no está conmigo, está contra mí; y el que no recoge conmigo, desparrama. 




+ Meditación Patrística:


Primer Punto: Otros, estimulados por los mismos aguijones de la envidia, le pedían que hiciese milagros; por esto sigue: "Y otros por tentarle le pedían les hiciese ver algún prodigio del cielo". Como diciendo: Aun cuando arrojas los demonios del cuerpo de un hombre, no es prueba suficiente de la obra divina; todavía no hemos visto algo que pueda compararse con los primitivos milagros: Moisés pasó al pueblo de Israel por medio del mar (Ex 12); Josué, que le sucedió, detuvo al sol en Gabaón (Jos 10). Pero tú no nos has hecho ver nada de esto. Al pedir, pues, milagros estupendos, daban a conocer cuáles eran entonces sus pensamientos respecto de Jesucristo.  (San Cirilo) 


Segundo Punto: También da a conocer en esto que su reino es indisoluble y eterno; y por tanto, a los que no esperan en Jesucristo, sino que creen que arroja a los demonios en virtud del príncipe de los demonios, les niega que sean de su reino eterno, lo cual se refiere también al pueblo judío. En efecto, ¿cómo puede ser eterno el reino de los judíos, el pueblo guardián de la ley, cuando niega a Jesús anunciado por ella? Y así la fe del pueblo judío se contradice; contradiciéndose se divide; dividiéndose se destruye; y por tanto, el reino de la Iglesia subsistirá siempre, porque su fe es indivisible y su cuerpo es uno solo. (San Ambrosio)   


 Tercer Punto: Pero ahora, en razón de su humanidad, quiere el Señor aparecer menor al Espíritu Santo, diciendo que echa los demonios en virtud del citado Espíritu. Con ello da a conocer que no es suficiente la naturaleza humana para arrojar a los demonios; solo puede en virtud del Espíritu Santo. (San Atanasio)




+ Mensaje 


“¡Queridos hijos! También hoy los invito a llenar vuestro día con breves y ardientes oraciones. Cuando oran, vuestro corazón está abierto y Dios los ama con un amor especial y les da gracias especiales. Por eso, utilicen este tiempo de gracia y conságrenlo a Dios como nunca antes hasta ahora. Hagan novenas de ayuno y de renuncia para que Satanás esté lejos de vosotros y la gracia alrededor de vosotros. Yo estoy cerca de vosotros e intercedo ante Dios por cada uno de vosotros. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!”  (Mensaje 25 de Julio del 2005)




• Coloquio:


 Señor, Dios nuestro, gracias por ser el Dios de la Paz y por enviarnos a Tu Hijo, Jesucristo, el Rey de la Paz. Gracias por enviarnos en este tiempo a María, la Reina de la Paz, quien nos llama a la paz en Tu Nombre, Señor, y a ser con Tu Hijo Jesús, portadores de paz y de amor en este mundo sin paz. Te pedimos la gracia de ser capaces de cumplir la tarea que María nos encomienda en este mensaje, como lo hizo Tu humilde sierva María. Libera nuestros corazones de toda inquietud, de toda ausencia de paz, de todo lo que no es amor. Danos la gracia de ser testigos de la paz y del amor auténticos que sólo Tú puedes dar a nuestras familias, a la Iglesia y al mundo, para que todos podamos ser portadores de paz y de amor.  (Fr. Slavko Babrbaric, Abril de 1999)




  • Comunión Espiritual

 “Padre eterno, permitid  que os ofrezca el Corazón de Jesucristo,  vuestro  Hijo muy  amado, como se ofrece Él mismo, a Vos  en sacrificio. Recibid  esta ofrenda por mí, así como por todos los deseos, sentimientos, afectos  y actos de este Sagrado Corazón. Todos son  míos, pues Él se inmola por mí,  y yo no quiero tener en adelante otros deseos que los suyos. Recibidlos para concederme por  sus méritos todas las gracias que me son necesarias, sobre todo la gracia de la perseverancia  final. Recibidlos como otros tantos actos de amor, de adoración y alabanza que ofrezco a vuestra  Divina Majestad, pues por el Corazón de Jesús sois dignamente honrado y glorificado. Amén.” (De Santa Margarita María Alacoque)