"Háganlos sentar”



 "Háganlos sentar”


VIERNES II DE PASCUA


Evangelio Diario y Meditación




 + Oración al Espíritu Santo


 Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración perfecta y absoluta de todo mi ser, que os hago en este día para que os dignéis ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida, en cada una de mis acciones, mi director, mi luz, mi guía, mi fuerza, y todo el amor de mi corazón.

Yo me abandono sin reservas a vuestras divinas operaciones, y quiero ser siempre dócil a vuestras santas inspiraciones. 

¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María y en María, según el modelo de vuestro amado Jesús. Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor. Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén




+ Santo Evangelio


 Evangelio según San Juan 6,1-15. 

Jesús atravesó el mar de Galilea, llamado Tiberíades. 

Lo seguía una gran multitud, al ver los signos que hacía curando a los enfermos. 

Jesús subió a la montaña y se sentó allí con sus discípulos. 

Se acercaba la Pascua, la fiesta de los judíos. 

Al levantar los ojos, Jesús vio que una gran multitud acudía a él y dijo a Felipe: "¿Dónde compraremos pan para darles de comer?". 

El decía esto para ponerlo a prueba, porque sabía bien lo que iba a hacer. 

Felipe le respondió: "Doscientos denarios no bastarían para que cada uno pudiera comer un pedazo de pan". 

Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: 

"Aquí hay un niño que tiene cinco panes de cebada y dos pescados, pero ¿qué es esto para tanta gente?". 

Jesús le respondió: "Háganlos sentar". Había mucho pasto en ese lugar. Todos se sentaron y eran uno cinco mil hombres. 

Jesús tomó los panes, dio gracias y los distribuyó a los que estaban sentados. Lo mismo hizo con los pescados, dándoles todo lo que quisieron. 

Cuando todos quedaron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos: "Recojan los pedazos que sobran, para que no se pierda nada". 

Los recogieron y llenaron doce canastas con los pedazos que sobraron de los cinco panes de cebada. 

Al ver el signo que Jesús acababa de hacer, la gente decía: "Este es, verdaderamente, el Profeta que debe venir al mundo". 

Jesús, sabiendo que querían apoderarse de él para hacerlo rey, se retiró otra vez solo a la montaña. 




+ Meditación Patrística:


 Primer Punto:  Gozando de tan alta doctrina, sólo se fijaban en los hechos extraordinarios, porque sus entendimientos estaban oscurecidos, pues los hechos extraordinarios, como dice San Pablo  ( 1Cor 14,22), no fueron dados a los fieles, sino a los infieles. Eran, pues, más sabios aquellos que, según San Mateo (Mt 7,28-29), quedaban estupefactos ante la grandeza de su doctrina. Pero ¿por qué no dice: "cuando lo veían ejecutar maravillosos milagros"? Porque este evangelista puso su mayor esmero en prestar atención a las predicaciones del Señor, llenando con ellas la mayor parte de su libro. Sigue: "Ascendió, pues, al monte, Jesús, y allí estaba sentado con sus discípulos". Subió al monte a causa del milagro que pensaba realizar, pero hizo subir consigo a los discípulos, en lo cual iba envuelta una reprensión a la muchedumbre que no lo seguía. Subió también al monte para enseñarnos a hacer silencio en el interior, huyendo de los tumultos y de la agitación de las cosas mundanas. Porque la soledad es muy a propósito para la contemplación (o para el conocimiento de las cosas sublimes y la meditación de las cosas divinas). Prosigue: "Y estaba cerca la Pascua, día de la fiesta de los judíos". Véase cómo, tratando de un año entero, no nos refiere el evangelista más que dos milagros de Jesucristo: la curación del paralítico y la del hijo del funcionario real. Y no se ocupó de hablar de todos, porque eligió de entre ellos, aunque pocos, los más grandes. ¿Y por qué no subió en el día de la fiesta? Derogaba poco a poco la Ley, tomando ocasión para ello de la malicia de los judíos.  (San Juan Crisóstomo)


 Segundo Punto:  Se le ofrecen, pues, cinco panes a la multitud y se le distribuyen. Pero se observa que se aumentan los pedazos en las manos de los que los distribuyen. No se hacían más pequeños porque los partían, sino que siempre los pedazos llenaban las manos de los que estaban distribuyendo. Ni los sentidos, ni la vista podían seguir la marcha de aquello que sucedía. Es lo que no era, se ve lo que no se comprende y sólo queda de creer que Dios puede hacer todas las cosas. (San Hilario)


 Tercer Punto: Debe tenerse en cuenta lo que generalmente se dice, a saber: que Dios no es de tal naturaleza que pueda ser visto con los ojos, y que sus milagros, con los que sostiene a todo el mundo y alimenta todas las criaturas, no llaman la atención, por la frecuencia con que se repiten. Pero se ha reservado algunos milagros para hacerlos con oportunidad fuera del curso y del orden regular de la naturaleza, no porque sean mayores, sino porque se ejercen menos frecuentemente, y así admiran por esta circunstancia más que aquéllos que se están realizando diariamente. Realmente es mayor milagro el gobierno de todo el mundo que el saciar a cinco mil hombres con cinco panes, y sin embargo, nadie se admira de este gobierno. Pero los hombres se admiran del otro milagro, no porque es mayor, sino porque es raro. Y no basta fijarnos en esto respecto de los milagros de Jesucristo. (San Agustín )




+ Mensaje


 “¡Queridos hijos! También hoy deseo invitarlos a la oración y al abandono total a Dios. Ustedes saben que Yo los amo y es por amor que he venido aquí, para mostrarles el camino de la paz y la salvación de sus almas. Yo deseo que ustedes me obedezcan y que no permitan a Satanás que los seduzca. Queridos hijos, Satanás es fuerte y por eso les pido sus oraciones y que me las ofrezcan por aquellos que están bajo su influencia, para que sean salvados. Den testimonio con sus vidas y ofrezcan sus vidas por la salvación del mundo. Yo estoy con ustedes y les doy las gracias. En el Cielo, ustedes recibirán el Padre la recompensa que El les ha prometido. Por tanto, hijitos, no se preocupen. Si ustedes oran, Satanás no podrá hacer nada contra ustedes, porque ustedes son hijos de Dios y el cuida de ustedes. Oren! Que el Rosario esté siempre en sus manos como signo para Satanás de que ustedes me pertenecen. Gracias por haber respondido a mi llamado!. (Mensaje, 25 de febrero de 1988)




+ Coloquio


 Dios, Padre nuestro, gracias porque Tú eres nuestro Padre y porque nos has llamado a ser Tus hijos. Gracias porque nos has revelado Tu amor por medio de Jesucristo, Tu Hijo, que se hizo hombre. Te alabamos por la misericordia que nos has mostrado en El. Te damos gracias porque nos has prometido enviarnos a Tu Espíritu Santo y especialmente por habernos enviado a María para que pueda guiarnos en este tiempo de gracia. Te pedimos, oh Dios, Padre nuestro, que abras nuestros corazones y nos liberes de todo lo que nos cierra a Ti. Danos la gracia de regocijarnos con Tu Palabra. Danos la gracia de poder entenderla y aceptar Tu voluntad sin miedo. (Fray Slavko Barbaric, 27 de Noviembre 1997)




+ Comunión Espiritual:


 “Padre eterno, permitid  que os ofrezca el Corazón de Jesucristo,  vuestro  Hijo muy  amado, como se ofrece Él mismo, a Vos  en sacrificio. Recibid  esta ofrenda por mí, así como por todos los deseos, sentimientos, afectos  y actos de este Sagrado Corazón. Todos son  míos, pues Él se inmola por mí,  y yo no quiero tener en adelante otros deseos que los suyos. Recibidlos para concederme por  sus méritos todas las gracias que me son necesarias, sobre todo la gracia de la perseverancia  final. Recibidlos como otros tantos actos de amor, de adoración y alabanza que ofrezco a vuestra  Divina Majestad, pues por el Corazón de Jesús sois dignamente honrado y glorificado. Amén.” (De Santa Margarita María Alacoque)